miércoles, 3 de julio de 2013

Cinco. Ursula Poznanski.


Esta reseña forma parte del sorteo y lectura conjunta organizada por los blogs de Laky (Libros que hay que leer) y Tatty (El universo de los libros). Gracias a la Editorial La Esfera de los Libros por el ejemplar.


Título original: Fünf
Edición original: Rowohlt Verlag GmbH, 2012
© De la traducción: Susana Andrés, 2013
© La Esfera de los Libros, S.L., 2013
Título en español: Cinco
Autora: Ursula Poznanski
Editorial: La Esfera de los Libros, S.L.
ISBN: 978-84-9970-592-7
Edición: Tapa dura con sobrecubierta
434 páginas
Precio: 21'90€


Argumento: El cadáver de una mujer de unos cuarenta años es encontrado en un prado donde pastaban unas vacas, cerca de Abtenau (Salzsburgo, Austria).
Beatrice Kaspary y Florin Wenninger, de la Oficina Federal de Investigaciones Criminales, serán los policías encargados, bajo la supervisión del jefe superior Hoffmann, de un caso que podría haber sido tratado como accidente, de no haber tenido el cadáver las manos atadas. En las plantas de los pies de la víctima aparecen tatuadas combinaciones de números que son tomados por la policía como coordenadas, que forman parte de una "búsqueda del tesoro" en el que se verá inmersa la pareja protagonista, con consecuencias para su propia vida.
Si queréis leer la sinopsis completa del libro, seguid este enlace.


Impresiones

Debo reconocer que el libro me ha dejado un buen sabor de boca. La autora ha sabido jugar con el tema de una búsqueda del tesoro para llevar al lector a lo largo de una investigación de asesinato, cuyo responsable parece ser un asesino en serie, al que mueven unas razones, que si bien no están claras en un inicio, se van aclarando a medida que avanza el libro, y ya en su conclusión.

Han comparado a la autora austriaca con Camilla Läckbery y Asa Larsson, aunque cada una tiene su estilo, que nos puede gustar más o menos. Lo importante es disfrutar con la lectura y con este libro se consigue.

Ursula Poznanski nos presenta aquí a una pareja de policías, que llevan dos años trabajando juntos pero que se conocen muy bien. Beatrice será pieza importante en la trama (ahí puede estar el paralelismo con las autoras antes citadas y sus protagonistas femeninas), y Florin la ayudará en lo laboral y personal. Beatrice se nos presenta como una mujer separada, con dos hijos, Mina y Jakob, que tiene que compaginar su trabajo con el cuidado familiar (gracias a la ayuda de su madre), y que no tiene una buena relación con su ex-marido, Achim, que tiene por costumbre llamar a altas horas de la noche para interesarse por los niños. Además, Beatrice guarda un importante secreto de su vida anterior, que tendrá relevancia en la trama, y del que seremos partícipes bien avanzada la historia.

Todos los motivos citados anteriormente pueden hacer que no conectemos desde el primer momento con el personaje femenino principal, pero a medida que avanzan las páginas tendemos a comprenderla (otra cosa es que estemos de acuerdo o no con su forma de actuar respecto a sus hijos y su ex-marido), o al menos yo lo he hecho, y no me ha resultado tan antipática como a algunos de los participantes en la lectura conjunta.

Si este libro tiene un toque especial, y creo que lo hemos visto todos, es la utilización del geocaching como nexo de unión.

A estas alturas, y si habéis leído el resto de las reseñas, todo el mundo sabe ya lo que es el geocaching (reconozco que yo particularmente no tenía ni idea de su existencia hasta que me he acercado a la lectura de Cinco). Para definirlo con palabras sencillas, es una especie de búsqueda del tesoro, en la que se utiliza un GPS y se trabaja con coordenadas. Los caches que se buscan son contenedores herméticos (en los que puedes encontrar casi cualquier cosa). Se hacen trades (lo habitual es sacar algo del recipiente y meter otra cosa), y se suelen utilizar acrónimos para dar las gracias (en el libro se repite mucho TFTH (Thanks for the hunt) (Gracias por la caza)).

Es precisamente el personaje de Stephan Gerlach, un joven compañero de trabajo de Beatrice y Florin el que los pone sobre la pista de esta práctica tan extendida, y en la que él mismo participa en sus ratos libres. Stephan pronto formará parte del equipo de investigación que guía al resto en la "búsqueda del tesoro", que no es más que una sucesión de pistas que dan lugar a nuevas coordenadas para llegar al desenlace final.

En mi opinión la autora ha sabido mantener la intriga, y el hecho de ir conociendo poco a poco a los personajes principales no es algo que me haya decepcionado. Reconozco que tardas un poco en conectar con ellos, pero a medida que conoces sus motivaciones van ganando peso. Beatrice demuestra amar su trabajo y a sus hijos, aunque estos últimos queden relegados a veces al cuidado de los abuelos. No tiene una buena relación con su ex-marido, pero no quiere cortar drásticamente la relación, pese a las llamadas telefónicas a horas intempestivas:
"Si cambio el número de teléfono, lo tengo en la puerta en menos de lo que canta un gallo. Y es el padre, tiene derecho a estar en contacto con sus hijos".
 Esconde un secreto de juventud que la perseguirá siempre, motivo por el cual acabó haciéndose policía (secreto que conoceremos bien avanzado el libro), y que parece convertirse en nexo de unión con el asesino.
"Era imposible dar marcha atrás en el tiempo. Imposible corregir el pasado. En caso contrario no estaría aquí."
Quizá los personajes son algo tópicos: mujer policía que quiere ser buena en su trabajo y con su familia (aunque se vea obligada a pedir favores), compañero que la ayuda en lo profesional y en lo personal (con el que se entrevé algo más que una mera amistad), y jefe que hace la vida imposible a sus subordinados, más pendiente del eco que está teniendo la noticia del asesinato que de la investigación en sí. Pese a todo, el conjunto me ha gustado. Conoceremos también a otros personajes, que van a ir formando parte de la investigación, y que resultarán de gran relevancia a la hora de aunar los acontecimientos del presente con el pasado, y dar sentido a la trama.

La historia, contada en pasado y en tercera persona por un narrador omnisciente, que nos acerca a los acontecimientos y a los pensamientos de los protagonistas, no está estructurada en capítulos como tal; la trama se va sucediendo y la historia en ocasiones viene precedida por unas coordenadas, características de las diferentes etapas por las que pasa la búsqueda, con una sucesión de hechos trascendentes.

Se nota que la autora conoce el tema del geocaching (tal como avisa al final del libro, ella lo practica), y ese conocimiento de la naturaleza embellece las descripciones, de forma que parece que somos partícipes también del momento de encontrar los "tesoros", por la forma de acercarnos al entorno. La abundancia de diálogos hace también que la lectura resulte amena y se avance rápidamente hacia el desenlace. Lástima no estar en Salzsburgo para practicar geocaching con los acertijos que se nos plantean en el libro. En definitiva, una lectura amena muy recomendable para todo aquel que quiera disfrutar de un buen rato de intriga.

Si os sentís atraídos por el geocaching, al parecer también muy practicado en España, no dejéis de visitar las siguientes páginas:

Curiosamente, cuando ya se había planteado la lectura conjunta, vi un reportaje en TVE en un telediario del fin de semana, donde se hablaba de esta práctica en España (desde luego no tiene nada que ver con asesinatos y disfrutas de la naturaleza, a la que hay que cuidar, como dice la autora al final de su libro). Os dejo el enlace al vídeo por si os animáis a verlo:



Sobre la autora

Ursula Poznanski nació en Viena en 1968, se matriculó en diversas carreras y aterrizó en una editorial técnica de Medicina. Tras el éxito fulminante de sus novelas para jóvenes -Erebos y Saeculum-, en la actualidad se dedica fundamentalmente a la literatura. De su primera incursión en el género policíaco, Cinco, se han vendido cerca de 200.000 ejemplares en lengua alemana y ha sido traducida al coreano, francés, holandés e italiano. Vive con su familia al sur de Viena.

(Datos biográficos extraídos del propio libro).

(Como esta reseña forma parte de una lectura conjunta, aquí os dejo un enlace al blog de Tatty donde se están colgando las diferentes reseñas de los participantes, por si queréis echarles un ojo).

Si os animáis con la lectura, no creo que os defraude, y os hará pasar un buen rato. Creo que le daría una oportunidad a la serie si continuara, porque me quedo con ganas de profundizar más en los personajes.

Se agradecen los comentarios.

6 comentarios:

  1. Ya lo he dicho, que a mí esta novela no termina de llamarme a pesar de las buenas reseñas que he leído.Por cierto, no se si es adrede pero tienes activada la verificación de palabras.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Para mí ha sido un grato descubrimiento. Se lee bien y deja un buen recuerdo. No descarto seguir los pasos a los protagonistas si hay continuación.
      ¡Gracias por el aviso!
      Un saludo.

      Eliminar
  2. ¡¡Hola guapa!!
    la tengo apuntada en mi lista de deseos pendientes, además me llama mucho la atención el juego de Geocaching.
    Besos.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. La verdad es que el Geocaching ha sido un grato descubrimiento. No me importaría poder practicarlo.
      ¡Gracias por comentar, Susana!
      Besos.

      Eliminar
  3. Hola guapa!!
    El libro no lo conocía y no tiene muy mala pinta. Gracias por la reseña, te sigo. Besotes ;)

    ResponderEliminar
  4. Pues a mi me ha ido ganando a medida que he visto vuestras opiniones, tanto es así que ya lo tengo esperándome
    Besos

    ResponderEliminar

¡Gracias por pasarte! ¡No te vayas sin comentar!