Ante todo, gracias a la Editorial sepha por el envío del ejemplar, y pedir disculpas por la tardanza en reseñar, que nada tiene que ver con el libro, puesto que se lee fácilmente, más bien se devora.
Título: Una casa respetable
Autor: Jaime Molina
Editorial: SEPHA
Primera edición: abril de 2013
ISBN: 978-84-15819-04-2
Formato: Tapa blanda con solapas
284 páginas.
Precio: 16'95€
© Jaime Molina García, 2013
© De esta edición: SEPHA Edición y Diseño, S.L., 2013
COLECCIÓN ANÉCDOTA
Diseño cubierta: José Luis Alvarado
(Si os interesa, también se puede adquirir el libro en la página de la propia editorial, en el siguiente enlace.
Sinopsis: La Habana, finales del siglo XIX. Un joven emigrado español asciende hasta la aristocracia local mediante una envenenada alianza de sorprendentes consecuencias. De vuelta a España, Celestino Navoa carga consigo un misterio que habitará en la mansión que hace construir en Granada, la Casa de las Torres. Desde ese momento, la casa se convertirá en el principal personaje de una saga familiar en la que asistiremos a los pedazos de una historia en la que se combinan poder, venganza, deseo, locura y muerte. La casa se convertirá en el legendario testimonio de una vidas (las de sus moradores) oscuramente enfrentadas a una fatal realidad regida por una fuerza ciega. Los actos y las pasiones presentes de cada personaje, más allá de su voluntad, se verán arrastrados como una proyección del pasado, en una emocionante narración que ahonda en el denso abismo de la soledad humana.
(Sinopsis según la trasera del libro).
Argumento: La demolición en Granada de la llamada "Casa de las Torres", construida por el arquitecto César Lotario, bajo las órdenes de don Celestino Navoa, un indiano enriquecido en las Américas antes del desastre de 1898, sirve como excusa para que el Diario del siglo XXI publique una serie de cartas sobre la historia de la casa y la familia que la habitó a lo largo de tres generaciones.
Es tanto el interés que la demolición, casi en secreto, de la conocida como Casa Navoa despertó entre los lectores, que se empezaron a publicar sucesivas entregas escritas por esos mismos lectores, donde cada uno aportaba su grano de arena, según había sido la relación con la casa o con algunos de sus habitantes. Esta recopilación de entregas serán las que configuren el libro y nos acerquen a la vida y milagros de la familia Navoa a lo largo de tres generaciones, desde don Celestino, que mandó construir la casa, hasta su hijo Horacio, y su nieto Aquilino.
Acercamiento a la novela
Federico Puig, abogado de la familia, vende los derechos de publicación de las supuestas memorias de Celestino Navoa, cuya vida en La Habana comenzó solo y sin un céntimo en el bolsillo, después de que unos rateros le quitaran lo poco que llevaba. Pero su destino estaba escrito y lejos de convertirse en un indigente acabaría siendo uno de los señores de la isla. Todas las afrentas a las que tuvo que hacer frente en la isla, que atentaban contra su persona, reavivaron su enemistad con la Iglesia Católica y contra los ricos y poderosos a los que en el fondo envidiaba; su meta era ser uno de ellos.
Un altercado con los matones que custodiaban "La Mansión de los Gazules", propiedad del banquero Cesáreo Hernández, acaba finalmente en un pacto entre éste y Celestino Navoa. A cambio de su enlace con Teresa, la hija poco agraciada del banquero, éste recibiría riqueza y posición; sólo se le exigía fidelidad hacia su esposa y que concibieran un hijo varón.
La forma de actuar de Celestino y lo que los demás contaban de él a partir del momento en que adquiere relevancia social contribuye a aumentar la leyenda sobre su persona. Poco le importó el nacimiento de su hijo, encaprichado como estaba de la Casa de las Amazonas, un local con mujeres de vida alegre, y de su dueña Maica, relación que tendrá nefastas consecuencias para la vida del protagonista.
El libro está estructurado en dos partes. En la primera con la publicación de las supuestas memorias de Celestino Navoa y los rumores que sobre él se contaban, nos acercamos a su figura en La Habana. El propio periódico nos ofrece dos finales distintos de su paso por la isla, siguiendo lo que se contaba en la época, para que el lector decida con cuál quedarse.
A la llegada al puerto de Cádiz con la mujer que lo había hecho feliz, encontraría la misma pobreza que había dejado años antes. Tras recorrer varios puntos de España, se asentaría en Granada, donde haría construir una casa réplica de la Casa de las Amazonas, donde realmente fue feliz; será conocida como la Casa de las Torres, verdadera protagonista de la historia y excusa para conocer, desde un punto de vista masculino, las vivencias de la familia Navoa de la mano de aquellos que los trataron, bien trabajando como sirvientes para ellos, o por formar parte del círculo íntimo de la familia a lo largo de las distintas generaciones, o bien porque conocían rumores sobre ellos que enriquecían su no tan conocida historia.
En la segunda parte, con Celestino ya en España, el autor nos acerca, de la mano de los comentarios y anécdotas que relatan los lectores en las cartas publicadas por el periódico, a las figuras de Horacio y Aquilino, hijo y nieto de Celestino respectivamente, y por tanto los que cargarán con el peso del apellido Navoa y todo lo que ello significa en un período convulso de la historia de España, con telón de fondo en la Guerra Civil y la posterior Dictadura franquista.
Las anécdota, opiniones, comentarios o noticias que tengan que ver directa o indirectamente con la vieja casa de los Navoa ayudan a recomponer los últimos años de don Celestino y los que serían sus descendientes. Cualquier aporte o rumor vertido por compañeros de juego, de estudios o del propio servicio ayudan a acercarse al personaje de Horacio Navoa y al que sería último miembro de la familia, Aquilino Navoa. Habladurías sobre la orientación sexual y política de estos personajes, comentarios que se contradicen unos a otros, historias completadas por el propio periódico para dar más importancia a la leyenda... En definitiva, unos protagonistas y una mansión que aunque no destacaba especialmente en lo arquitectónico, había visto pasar grandes personalidades de la política y la sociedad de la época, de ahí el revuelo causado por su demolición.
Historia contada desde el punto de vista masculino, a diferencia de lo que suele ocurrir en otras sagas, las mujeres, secundarias, estarán presentes a lo largo de la historia, como esposas o amantes de los protagonistas; además, son varias las lectoras del periódico las que aportan su vivencia con los diferentes personajes masculinos. Teresa Hernández, Carlota Castel y Adriana Lerroux, así como Maica, protagonistas femeninas de la historia por su matrimonio con los Navoa, serán personajes secundarios que nos ayudarán a conocer el trasfondo real de lo narrado; matrimonios de conveniencia, amor verdadero, sufrimiento y búsqueda de una posición social que no siempre da la felicidad.
Como nota de interés, la aparición de una presencia fantasmal, que parece acompañar a los protagonistas desde el mismo momento en que se alza la Casa de las Torres, y que se mantiene hasta el momento de su demolición.
Como nota positiva del libro, la historia contada desde el lado masculino (aunque como lectora sufres con algunas de las protagonistas), y a varias voces. El recurso de las cartas que son publicadas en el periódico para dar a conocer la vida de una importante familia a lo largo de tres generaciones, siempre desde el punto de vista de las vivencias y anécdotas aportadas por los propios lectores del periódico, resulta algo muy novedoso, y a mí personalmente me ha gustado.
Se agiliza bastante la lectura porque son varios los narradores, y en ocasiones un rumor es planteado y al poco es rebatido, de forma que el lector (nosotros) puede hacerse su propia opinión sobre lo que debió ocurrir en realidad.
Una historia que se remonta al siglo XIX y que llega casi a nuestros días, con guiños a acontecimientos importantes como la Independencia de Cuba, la Segunda República, la Guerra Civil española y la Dictadura franquista, y a personajes reales, que pudieron haber tenido alguna relación con los Navoa, según la rumorología popular, como el poeta Federico García Lorca o un aún poco conocido Alfonso Guerra.
En definitiva, una obra interesante, que ya se alzó con el Premio de Novela Juan Valera, que organiza el Ayuntamiento de Cabra (Córdoba), en el año 2009. Obra interesante y que se deja leer a pesar (y eso se agradece) del rico vocabulario de su autor. Ha sido un buen descubrimiento, y lo recomiendo si queréis adentraros en una lectura diferente de las llamadas sagas familiares, narrada eso sí por muchas y variadas voces.
Autor: Jaime Molina
Editorial: SEPHA
Primera edición: abril de 2013
ISBN: 978-84-15819-04-2
Formato: Tapa blanda con solapas
284 páginas.
Precio: 16'95€
© Jaime Molina García, 2013
© De esta edición: SEPHA Edición y Diseño, S.L., 2013
COLECCIÓN ANÉCDOTA
Diseño cubierta: José Luis Alvarado
(Si os interesa, también se puede adquirir el libro en la página de la propia editorial, en el siguiente enlace.
Sinopsis: La Habana, finales del siglo XIX. Un joven emigrado español asciende hasta la aristocracia local mediante una envenenada alianza de sorprendentes consecuencias. De vuelta a España, Celestino Navoa carga consigo un misterio que habitará en la mansión que hace construir en Granada, la Casa de las Torres. Desde ese momento, la casa se convertirá en el principal personaje de una saga familiar en la que asistiremos a los pedazos de una historia en la que se combinan poder, venganza, deseo, locura y muerte. La casa se convertirá en el legendario testimonio de una vidas (las de sus moradores) oscuramente enfrentadas a una fatal realidad regida por una fuerza ciega. Los actos y las pasiones presentes de cada personaje, más allá de su voluntad, se verán arrastrados como una proyección del pasado, en una emocionante narración que ahonda en el denso abismo de la soledad humana.
(Sinopsis según la trasera del libro).
Argumento: La demolición en Granada de la llamada "Casa de las Torres", construida por el arquitecto César Lotario, bajo las órdenes de don Celestino Navoa, un indiano enriquecido en las Américas antes del desastre de 1898, sirve como excusa para que el Diario del siglo XXI publique una serie de cartas sobre la historia de la casa y la familia que la habitó a lo largo de tres generaciones.
Es tanto el interés que la demolición, casi en secreto, de la conocida como Casa Navoa despertó entre los lectores, que se empezaron a publicar sucesivas entregas escritas por esos mismos lectores, donde cada uno aportaba su grano de arena, según había sido la relación con la casa o con algunos de sus habitantes. Esta recopilación de entregas serán las que configuren el libro y nos acerquen a la vida y milagros de la familia Navoa a lo largo de tres generaciones, desde don Celestino, que mandó construir la casa, hasta su hijo Horacio, y su nieto Aquilino.
Acercamiento a la novela
Federico Puig, abogado de la familia, vende los derechos de publicación de las supuestas memorias de Celestino Navoa, cuya vida en La Habana comenzó solo y sin un céntimo en el bolsillo, después de que unos rateros le quitaran lo poco que llevaba. Pero su destino estaba escrito y lejos de convertirse en un indigente acabaría siendo uno de los señores de la isla. Todas las afrentas a las que tuvo que hacer frente en la isla, que atentaban contra su persona, reavivaron su enemistad con la Iglesia Católica y contra los ricos y poderosos a los que en el fondo envidiaba; su meta era ser uno de ellos.
Un altercado con los matones que custodiaban "La Mansión de los Gazules", propiedad del banquero Cesáreo Hernández, acaba finalmente en un pacto entre éste y Celestino Navoa. A cambio de su enlace con Teresa, la hija poco agraciada del banquero, éste recibiría riqueza y posición; sólo se le exigía fidelidad hacia su esposa y que concibieran un hijo varón.
La forma de actuar de Celestino y lo que los demás contaban de él a partir del momento en que adquiere relevancia social contribuye a aumentar la leyenda sobre su persona. Poco le importó el nacimiento de su hijo, encaprichado como estaba de la Casa de las Amazonas, un local con mujeres de vida alegre, y de su dueña Maica, relación que tendrá nefastas consecuencias para la vida del protagonista.
El libro está estructurado en dos partes. En la primera con la publicación de las supuestas memorias de Celestino Navoa y los rumores que sobre él se contaban, nos acercamos a su figura en La Habana. El propio periódico nos ofrece dos finales distintos de su paso por la isla, siguiendo lo que se contaba en la época, para que el lector decida con cuál quedarse.
A la llegada al puerto de Cádiz con la mujer que lo había hecho feliz, encontraría la misma pobreza que había dejado años antes. Tras recorrer varios puntos de España, se asentaría en Granada, donde haría construir una casa réplica de la Casa de las Amazonas, donde realmente fue feliz; será conocida como la Casa de las Torres, verdadera protagonista de la historia y excusa para conocer, desde un punto de vista masculino, las vivencias de la familia Navoa de la mano de aquellos que los trataron, bien trabajando como sirvientes para ellos, o por formar parte del círculo íntimo de la familia a lo largo de las distintas generaciones, o bien porque conocían rumores sobre ellos que enriquecían su no tan conocida historia.
En la segunda parte, con Celestino ya en España, el autor nos acerca, de la mano de los comentarios y anécdotas que relatan los lectores en las cartas publicadas por el periódico, a las figuras de Horacio y Aquilino, hijo y nieto de Celestino respectivamente, y por tanto los que cargarán con el peso del apellido Navoa y todo lo que ello significa en un período convulso de la historia de España, con telón de fondo en la Guerra Civil y la posterior Dictadura franquista.
Las anécdota, opiniones, comentarios o noticias que tengan que ver directa o indirectamente con la vieja casa de los Navoa ayudan a recomponer los últimos años de don Celestino y los que serían sus descendientes. Cualquier aporte o rumor vertido por compañeros de juego, de estudios o del propio servicio ayudan a acercarse al personaje de Horacio Navoa y al que sería último miembro de la familia, Aquilino Navoa. Habladurías sobre la orientación sexual y política de estos personajes, comentarios que se contradicen unos a otros, historias completadas por el propio periódico para dar más importancia a la leyenda... En definitiva, unos protagonistas y una mansión que aunque no destacaba especialmente en lo arquitectónico, había visto pasar grandes personalidades de la política y la sociedad de la época, de ahí el revuelo causado por su demolición.
Historia contada desde el punto de vista masculino, a diferencia de lo que suele ocurrir en otras sagas, las mujeres, secundarias, estarán presentes a lo largo de la historia, como esposas o amantes de los protagonistas; además, son varias las lectoras del periódico las que aportan su vivencia con los diferentes personajes masculinos. Teresa Hernández, Carlota Castel y Adriana Lerroux, así como Maica, protagonistas femeninas de la historia por su matrimonio con los Navoa, serán personajes secundarios que nos ayudarán a conocer el trasfondo real de lo narrado; matrimonios de conveniencia, amor verdadero, sufrimiento y búsqueda de una posición social que no siempre da la felicidad.
Como nota de interés, la aparición de una presencia fantasmal, que parece acompañar a los protagonistas desde el mismo momento en que se alza la Casa de las Torres, y que se mantiene hasta el momento de su demolición.
Como nota positiva del libro, la historia contada desde el lado masculino (aunque como lectora sufres con algunas de las protagonistas), y a varias voces. El recurso de las cartas que son publicadas en el periódico para dar a conocer la vida de una importante familia a lo largo de tres generaciones, siempre desde el punto de vista de las vivencias y anécdotas aportadas por los propios lectores del periódico, resulta algo muy novedoso, y a mí personalmente me ha gustado.
Se agiliza bastante la lectura porque son varios los narradores, y en ocasiones un rumor es planteado y al poco es rebatido, de forma que el lector (nosotros) puede hacerse su propia opinión sobre lo que debió ocurrir en realidad.
Una historia que se remonta al siglo XIX y que llega casi a nuestros días, con guiños a acontecimientos importantes como la Independencia de Cuba, la Segunda República, la Guerra Civil española y la Dictadura franquista, y a personajes reales, que pudieron haber tenido alguna relación con los Navoa, según la rumorología popular, como el poeta Federico García Lorca o un aún poco conocido Alfonso Guerra.
En definitiva, una obra interesante, que ya se alzó con el Premio de Novela Juan Valera, que organiza el Ayuntamiento de Cabra (Córdoba), en el año 2009. Obra interesante y que se deja leer a pesar (y eso se agradece) del rico vocabulario de su autor. Ha sido un buen descubrimiento, y lo recomiendo si queréis adentraros en una lectura diferente de las llamadas sagas familiares, narrada eso sí por muchas y variadas voces.
Aquí dejo el booktrailer del libro, por si alguien se anima:
Sobre el autor
Jaime Molina García nació en Linares (Jaén), en 1969. Es Licenciado en Informática por la Universidad de Granada, donde trabaja en la actualidad, compaginando su actividad profesional con la escritura.
Es autor de cuentos, novelas cortas y novelas, habiendo sido premiado en las tres categorías en diversos certámenes literarios. Entre sus premios caben citar el Castillo-Puche de novela corta por El fantasma de John Wayne (2008), el premio de narrativa Rei en Jaume por El pianista acompañante (2009) o el Juan Valera de novela por Una casa respetable (2009), así como el Premio Ciudad de Valencia de novela por Lejos del cielo (2011), obra publicada también por la editorial Sepha.
Jaime Molina García nació en Linares (Jaén), en 1969. Es Licenciado en Informática por la Universidad de Granada, donde trabaja en la actualidad, compaginando su actividad profesional con la escritura.
Es autor de cuentos, novelas cortas y novelas, habiendo sido premiado en las tres categorías en diversos certámenes literarios. Entre sus premios caben citar el Castillo-Puche de novela corta por El fantasma de John Wayne (2008), el premio de narrativa Rei en Jaume por El pianista acompañante (2009) o el Juan Valera de novela por Una casa respetable (2009), así como el Premio Ciudad de Valencia de novela por Lejos del cielo (2011), obra publicada también por la editorial Sepha.
Como siempre, se agradecen los comentarios. Nos leemos.