jueves, 27 de septiembre de 2018

"Caída libre", de Neus Arqués.

Está claro que los miembros del grupo #SoyYincanera empezamos con ganas y fuerzas la nueva etapa tras el "supuesto" parón veraniego (os garantizo que a título particular, y en conjunto, el grupo ha seguido leyendo). La vuelta no puede ser más interesante, porque hemos tenido el placer de contar con títulos publicados por Roca Editorial, con la que ya hemos disfrutado en lecturas anteriores. Aquí traigo mi modesta opinión de un título recién publicado.

Datos del libro
Título: Caída libre
Autora: Neus Arqués
Editorial: Roca Editorial de Libros, S.L.
Formato: Tapa dura con sobrecubierta
ISBN: 978-84-17092-97-9
Primera edición: septiembre de 2018
320 páginas.

Sinopsis (tomada del propio libro):

Ángela es una editora en la cuerda floja cuyo autor estrella desaparece. Para encontrarlo, deberá adentrarse en el mundo de las mafias inmobiliarias de la mano del comisario Jotapé Castillejos.
Carolina se juega la promoción profesional cuando un amante despechado la amenaza con divulgar pruebas de su exuberancia sexual.
Luisa lo dejó todo por una historia de amor que ahora le pasa factura en forma de mobbing.
Las tres mujeres viven en el barrio barcelonés de Gracia, cuya gentrificación se acelera. No saben a dónde van, pero sí saben que no llegarán donde iban, porque el camino trazado ha desaparecido. Sus crisis privadas se cruzan entre sí y con la crisis socioeconómica general.
¿Dónde te agarras cuando todo se mueve? Caída libre es la historia de tres mujeres en crisis en una huida hacia delante.

Datos sobre la autora

Neus Arqués es autora de las novelas Un hombre de pago, Una mujer como tú y Todo tiene un precio, de diversos manuales de comunicación y del ensayo Vive 50, donde planteaba en clave autobiográfica la crisis de los cincuenta, que retoma en Caída libre de la mano de Ángela, su protagonista.
Es profesora especializada en Gestión de la visibilidad. Le interesa especialmente el tema de la invisibilidad de las mujeres y de los escritores.
Con la novela que hoy presentamos, en librerías desde el 13 de septiembre, Neus Arqués ha sido galardonada con el Premio Internacional de Narrativa Marta de Mont Marçal 2018.

Impresiones sobre el libro

Debo reconocer que no sabía nada del libro que hoy traigo a mi pequeño espacio virtual. En este caso no tenía referencias de la autora, ni tampoco del título, solo el aval de una editorial con la que estamos disfrutando mucho por lo último publicado y la recomendación de una de las responsables de la iniciativa #SoyYincanera, en cuyo criterio confío. Estas han sido razones suficientes para embarcarme en la lectura simultánea de este título, y debo decir que no me he arrepentido de ello.

"Caída libre" se nos presenta como una novela fresca, actual, y muy fácil de leer, que tiene su baza en tres protagonistas femeninas que no están pasando por su mejor momento en su faceta profesional y personal. Ángela ha visto desmoronado su mundo, porque en poco tiempo ha pasado de ser una mujer con éxito profesional en su cometido como editora en una prestigiosa firma a ver peligrar ese mismo puesto de trabajo porque el sello editorial del que ella está encargada no tira lo suficiente en el apartado de ventas y sus jefes están planteándose cerrarlo, con lo que en poco tiempo podría verse en la necesidad de bucear en el mundo laboral a la búsqueda de un nuevo trabajo, algo casi imposible dada su edad y la competencia de jóvenes que vienen tirando fuerte en todos los aspectos del mercado laboral.
"... No solo de ventas vivía un sello: era necesaria una línea editorial firme que ubicara al lector, construir catálogo." (Pero para desgracia de Ángela, los nuevos dueños responsables de la editorial estaban más preocupados por las ventas).
Por si esto fuera poco, en lo personal no está pasando su mejor momento, porque a pesar de su edad (las protagonistas son cincuentañeras) ya ha quedado viuda, y el único apoyo que podría brindarle su hija no es total, porque la adolescente, como cualquier jovencita de hoy en día que se precie, trata de disfrutar su propia vida junto a su novio y amigos, dejando un poco al margen de esta vida a su madre, que se apoyará en la lucha por "sobrevivir" en un trabajo que cada vez se le hace más cuesta arriba, tratando de mantener su día a día de rutina como si la vida no le hubiera cambiado.
"... Se vistió con los tejanos estrechos que le hacían el culo mono, la blusa de manga tres cuartos (ya no era cuestión de enseñar mucho los codos) y unos zapatos de tacón bajo. Antes de irse se quitó la alianza a escondidas, el anillo con el que normalmente ocultaba su viudedad; después, besó a su hija como si no la fuera a ver más. Ahora se despedía siempre así, por si las moscas. Cuando el infarto se llevó a Marc, no pudo despedirse".

En esta lucha por la supervivencia personal y laboral se verá apoyada por Carolina y Luisa, las otras dos protagonistas de la historia, que forman un grupo de tres mujeres muy diferentes entre sí pero que por ese mismo motivo se complementan entre ellas. Las historias narradas en el libro harán que nosotros como lectores disfrutemos de las peripecias de estas protagonistas, en las cuales podemos en algún momento vernos identificados, aunque no estemos pasando por la crisis de los cincuenta, no estemos a punto de perder nuestro trabajo o sintamos que debemos mantenernos jóvenes para los demás; son matices y situaciones narradas en el libro las que nos hacen en algún momento sentirnos identificados. "Caída libre" se nos vende como un libro para mujeres, pero personalmente opino que es algo más. Cierto es que sus protagonistas son mujeres, y que son de sus problemas de los que van a hablarnos en este libro, pero si ahondamos algo más encontramos una historia de intriga que tiene como protagonista a la mafia rusa, con la desaparición de un antiguo amigo de Ángela, Roberto Iglesias, un personaje venido a menos que ha pasado de una carrera meteórica en el mundo de las finanzas donde se codeaba con lo más granado de la sociedad, a caer en desgracia y a poner en solfa el mundo inmobiliario y todo lo que ello conlleva, plasmando sus denuncias e impresiones en un libro que va a resultar un éxito de ventas y supondrá el espaldarazo para reactivar la carrera de Ángela en la editorial. La posterior desaparición del escritor y los esfuerzos de Ángela por encontrarlo para que cumpla con los compromisos literarios que ha adquirido con la publicación de su libro, compromisos de los que depende el futuro de la propia Ángela en la editoria, ponen a nuestra protagonista en contacto con el inspector Jotapé Castillejos, todo un personaje que demostrará especial interés en la investigación de la desaparición del escritor precisamente por un profundo interés en la propia Ángela. Las tres protagonistas, en caída libre en el momento por el que está pasando su vida van a demostrarse a sí mismas que son válidas tanto en lo personal, resultando atrayentes a pesar de su edad, como en lo profesional, donde luchan, con mejor o peor resultado, por hacerse un hueco y mantenerse activas y lo más importante, reconocidas, con el inconveniente de tener que luchar por destacar, por demostrar que son igual de válidas e incluso mejores que los hombres con los que se ven obligadas a competir o con los que se relacionan en su día a día en sus distintas facetas. En este sentido el libro es un alegato a la MUJER, obligada a demostrar en todo momento su valía, algo que por otro lado no se le suele exigir a los hombres.
"... Atraer al prójimo es un afán inherente a la raza humana, condición necesaria para resolver la necesidad de protección."
El equipo protagonista queda completado con Carolina y Luisa. Carolina es sin duda la más atrevida de las tres, la que está más segura de sí misma, y se ve obligada en lo profesional a competir por hacerse con la responsabilidad de una firma importante dentro de su trabajo, luchando contra un equipo mucho más joven y a priori mejor preparado, y en lo personal, decidida a no atarse a nadie y viviendo su sexualidad hasta las últimas consecuencias, aunque tenga que enfrentarse por ello a amantes despechados que no aceptan un no por respuesta. En el otro vértice del triángulo de protagonistas, Luisa, quizá la que en principio pueda parecernos la más normal de las tres, y que vive las consecuencias de haber abandonado un matrimonio de conveniencia en el que no era feliz por su enamoramiento de un músico con el que ha tenido una hija y con el que ahora convive, aunque el futuro laboral de la pareja no sea nada boyante, ella sin casi voz ni voto a la sombra del que fue su marido, con el que comparte lugar de trabajo, sometida a un mobbing laboral, y él sobreviviendo de camarero, porque no consigue trabajar de lo suyo. Luisa y su pareja son ejemplo de que el amor lo puede todo, y si alguna vez ella tiene dudas no tiene más que mirar a los ojos a su hija, fruto de su actual relación, que lo es todo para ella.
"... Ahora vivía en una casa más pequeña, en un barrio nuevo, con cuyas vecinas compartía tardes a la fresca haciendo trabajos manuales. Sufría mal ambiente en el trabajo y discusiones frecuentes con su ex por la custodia del hijo. Luisa miraba a Danny, en animada conversación con una abuela encorvada, y se preguntaba si, de no haber habido embarazo, se hubiese separado de Jaime. ¿Fue Danny el empuje que necesitaba para salir del letargo? ¿O fue un sarampión que le dio muy fuerte?
En aquel momento su hija se le acercó, tiznada de pintura, blandiendo una galleta.
-- ¡Mami, toma! ¿Marta está repartiendo la merienda y me ha dado a mí primero! Esta es para ti. -- Y le metió un trozo de galleta en la boca.
Luisa masticó, le sonrió y vio que su pregunta era estéril. Sin Danny no habría habido Lola. Ni migas de galleta cayéndole por la comisura de los labios en plena tarde de agosto. Igual la felicidad era esto."
Ángela, Carolina y Luisa llevan el peso de una trama entretenida, muy actual. Estamos ante un libro de fácil lectura, pero no por ello vamos a menospreciar lo que en él se cuenta, porque Neus Arqués ha conseguido acercarnos con su modo de narrar y con la historia por ella creada unos problemas que rodean a la mujer en su día a día, especialmente a medida que van pasando los años en su vida. El libro no habla solo de la dificultad del mercado laboral de hoy en día enfocado al público femenino, sino del desastre que supone en general intentar resurgir como si de un ave fénix se tratara, cuando las dificultades del día a día nos complican la existencia. Sí que resulta un alegato a lo difícil que lo tiene la mujer, que parece que debe estar siempre perfecta, demostrar en todo momento su valía y procurar no envejecer de cara a los demás; si a esto le sumamos que alguna quiera vivir libremente su sexualidad, pueden ser víctimas de malos entendidos en el trabajo y en su entorno social, donde acabarán siendo señaladas. En este sentido, el libro refleja la hipocresía de la sociedad en la que nos ha tocado vivir, tocando temas también como la especulación urbanística, las diferencias entre padres e hijos, el abismo generacional entre jóvenes y mayores, y todo ello aderezado con una historia de intriga, con algún que otro toque de humor, escrito todo ello con un lenguaje muy cercano y en definitiva, lectura interesante y ágil a la que recomiendo acercarse si hay posibilidad, teniendo en cuenta que cualquier lector (hombre o mujer) va a disfrutar con la trama, porque la autora trata temas que todos deberíamos tener asimilados a pesar de nuestra condición personal.

"Caída libre" ha resultado una lectura entretenida y muy recomendable, que no decepciona, y que por supuesto recomiendo, si aún no habéis tenido el placer de acercaros a ella. Es un alegato a la superación, en cualquiera de las facetas del ser humano, sin importar su género, y en ese sentido merece ser leída. Yo no me arrepiento de haberlo hecho.
"... las personas estamos aquí para cruzarnos y descruzarnos, y que al final lo que nos queda son esas coincidencias, esos momentos preciosos de comunión con otro, con quien supo ver quiénes somos, aunque fuera un momento solo."
Lo dicho, no dejéis de leer el libro si se cruza en vuestro camino, que pasaréis un buen momento seguro. Deseando saber vuestras impresiones. Como siempre, nos leemos.
 
 

jueves, 20 de septiembre de 2018

"La mirada de la ausencia", de Ana Iturgaiz.

Nos gusta la novela negra en #SoyYincanera, pero de vez en cuando apostamos por otros géneros, y disfrutamos con una buena dosis de novela histórica, que especialmente agradezco, sobre todo si trata una época no tan recordada por mí en cuanto a estudios se refiere, centrada en la España de finales del XIX, con el asedio carlista a la ciudad de Bilbao, unos hechos históricos que la autora ha sabido acercarnos con gran maestría.
Sin más, vamos con los datos técnicos del libro:

Título: La mirada de la ausencia
Autora: Ana Iturgaiz
Editorial: Roca Editorial de Libros, S.L.
Formato: Tapa dura con sobrecubierta
ISBN: 978-84-17305-00-0
Primera edición: septiembre de 2018
384 páginas.
PVP: 18'90€

Sinopsis (tomada del propio libro):

El 21 de febrero de 1874 el ejército carlista pone cerco a la ciudad de Bilbao. En ella se encuentran Javier Garay, un fotógrafo de retratos eróticos, e Inés Otaola, una planchadora que ha perdido su trabajo.
Sin embargo, las aspiraciones de Javier no pasan por quedarse encerrado en la ciudad sitiada. Tampoco Inés sospecha que el fotógrafo es su oportunidad para recuperar lo que nunca debió haber perdido.
Un perfecto retrato de las aspiraciones y fracasos de los hombres y mujeres de finales del siglo XIX, un alegato pacifista en una época de cambios donde la fotografía se convierte en testigo del horror y la pasión.

Datos sobre la autora

Ana Iturgaiz nació en 1965 en Getxo, una ciudad al borde del mar Cantábrico. Después de graduarse en Historia, se mudó a Madrid para trabajar en el mundo de las bibliotecas y los archivos. Los libros y los documentos antiguos son parte de su vida. Le encantan la documentación, los lugares con pasado y las viejas fotografías, y plasma esas pasiones en sus historias.
En 2010 quedó finalista del Premio Novela Romántica 2010, organizado por Ediciones B y, desde entonces, ha publicado cinco novelas más. También escribe pequeños relatos que comparte con sus lectores y que pueden encontrarse en su web: http://www.anaiturgaiz.com/


Impresiones sobre el libro

La historia que refleja "La mirada de la ausencia" tiene lugar en torno a la ciudad de Bilbao, en 1874, poco antes del inicio de la llamada tercera guerra carlista, guerra civil que se desarrolló en España, entre los partidarios de Carlos, duque de Madrid, pretendiente carlista con el nombre de Carlos VII, y los gobiernos de Amadeo I, de la Primera República y de ALfonso XII. Tenía su origen en las pretensiones de Carlos, hermano del que fuera rey Fernando VII, de acceder al trono de España por encima de Isabel II, la hija de Fernando VII. Además de una guerra cruenta, fue un choque de ideologías entre los combatientes, entre el liberalismo defendido por unos y el absolutismo defendido por otros, con la excusa de la tierra por la que guerrear. Partidarios de liberales y carlistas tendrán representación en la páginas de "La mirada de la ausencia" y las conversaciones que mantendrán unos y otros en los inicios del libro, y cuando la contienda ya alcance sus mayores cotas de dramatismo serán magistralmente descritas por Ana Iturgaiz en su libro, que arranca con el asedio de la ciudad de Bilbao en la que es conocida por algunos como Tercera Guerra Carlista. La autora ha sabido dibujar muy bien el escenario histórico y geográfico en el que transcurre la novela, de forma que los que no tenemos el placer de conocer esa parte tan bonita de la geografía española hemos podido hacernos una perfecta foto de lugar de los escenarios narrados y del tiempo histórico en el que la autora ha querido hacer transcurrir su obra, un acercamiento a un período histórico no demasiado tratado en la literatura, con cuyas pinceladas he disfrutado mucho, porque no se trata de contar fechas y datos de cuánta gente participó en el conflicto, o de las bajas que éste ocasionó, sino de acercar los motivos de la lucha, de la supervivencia de los habitantes de la zona por conseguir mejorar sus condiciones de vida, algunos bajo unos ideales y otros dándose cuenta de que lo importante es sobrevivir al día a día y disfrutar el momento que la vida les brinda. Todo eso lo encontramos en el libro que hoy traemos aquí, de la mano de sus dos protagonistas principales, Javier Garay Zabala  e Inés Otaola Azcona, dos representantes de una clase humilde que luchan por mejorar sus condiciones de vida por un lado y alcanzar un estatus y un reconocimiento por la sociedad en la que convive en el caso de Javier, y procurar el sustento económico a su familia en el caso de Inés.

Inés, pilar fundamental de la historia, es una chica humilde que debe sacar adelante a su abuela y su hermano pequeño, desde que tuvieran que abandonar las tierras familiares que quedaron a cargo de su hermano  mayor, que no dudó en expulsar a la familia obligándoles a huir a la ciudad, buscando una vida mejor. Para conseguir el sustento de los tres y una educación a la que ella no pudo acceder para su hermano, trabaja como planchadora en casa de una familia pudiente, hasta que por error caen en sus manos unas fotografías de una mujeres que posan ligeras de ropa, que el señor guardaba en uno de sus cajones. Como los secretos de una familia se quedan en esa familia, la dueña de la casa para la que trabaja no dudará en prescindir de los servicios de Inés, que a partir de entonces, y en un panorama desfavorable, con la ciudad sitiada, sin trabajo, con escasez de alimentos y la miseria que pulula por las calles, se ve en la necesidad de buscar al fotógrafo que elabora esas fotos para poder seguir llevando alimento a los suyos. El fotógrafo no es otro que Javier, un joven idealista, que trabaja como ayudante de su futuro suegro, un afamado fotógrafo de Bilbao que en opinión de Javier pierde su tiempo porque no evoluciona, empeñado solo en hacer retratos de personajes de bien de la clase pudiente de la ciudad. Javier aspira a más, quiere ser reportero de guerra, contar al mundo lo que de verdad pasa en uno y otro lado de los dos bandos enfrentados en esta guerra fraticida, pero mientras encuentra su lugar, algo difícil en la época retratada, no duda en hacer fotografías algo picantes, con un punto de erotismo, de chicas más o menos necesitadas, que luego vende a los hombres de las clases sociales más estables de la ciudad de Bilbao. Y será precisamente en este contexto en el que se conozcan los personajes, sin saber que la guerra que se está desarrollando va a acabar uniéndolos más de lo que se hubieran podido imaginar.
"A pesar de querer terminar cuanto antes, a pesar de los nervios, a pesar de la necesidad de tener la ganancia en el bolsillo, no fue derecha a la calle de la Pelota. Por eso vio a niños, mujeres y hasta a un grupo de monjas mercedarias a los que los carlistas no habían permitido la salida, regresar por la calle Achuri de vuelta a sus jaulas. Por eso comprobó, al pasar por la calle Ronda, que las balas de los cañones carlistas habían arrancado de cuajo el mirador de un tercer piso que ahora se encontraba en medio de la calle. Junto a los cascotes, unos vecinos se santiguaban por la suerte que habían tenido de que no les cayera encima. Por eso supo que mientras ella se decidía a mostrar a un desconocido partes de su cuerpo que nadie había visto a cambio de unas monedas con las que llenar la olla de su familia, otros protegían la puerta de sus casas con lujosas barricadas fabricadas con piezas de terciopelos, sedas y rasos. «Y es que ante la angustia y el miedo, la riqueza no sirve para nada.»" (Página 80)
"La mirada de la ausencia" no es un libro romántico, pero en él encontramos amor, a la pareja, a la familia, a aquellos que nos ayudan y forman parte de nuestro día a día y en los que podemos confiar, a pesar de que con ellos no nos una un vínculo de sangre, amor a la tierra que se trabaja, por la que se lucha, amor a unos ideales, a una necesidad de cambiar el mundo, de hacer llegar al resto las cosas tal y como son realmente y no manipuladas por uno u otro bando en conflicto, deseo de prosperar, de sobrevivir al día a día, de vivir el momento en muchos casos. Estamos ante una bella recreación histórica con la que sinceramente he disfrutado. Debo reconocer que sí conocía a la autora, de hecho tengo un libro suyo esperando en mi estantería, pero el hecho de que fuera etiquetado como novela romántica ha contribuido a que lo dejara de lado. Ahora, leyendo el libro que hoy os traigo, reconozco que voy a darle una nueva oportunidad a la autora, porque si bien juega con el amor y los sentimientos, el trasfondo histórico en el que transcurre la obra y la manera de narrar que tiene Ana hacen que el libro se lea bien, que las páginas avancen rápidamente entre nuestras manos y que sin duda den ganas de seguir leyendo algo más sobre el período histórico aquí retratado. Reconozco que no sabía qué iba a encontrar entre las páginas de "La mirada de la ausencia", a pesar del contexto histórico que retrataba. El tema de las fotografías subidas de tono me hacía pensar que los derroteros iban a girar por ahí, pero no, nada más lejos de la realidad; esas fotografías y la necesidad de unos y otros de posar como modelos, crear las imágenes e incluso comprarlas no hace más que acercar al lector a los problemas de la época en las distintas escalas de la sociedad. La fotografía es una buena excusa para retratar los problemas de una guerra cruenta que se cebó en hermanos, vecinos y familiares, y ha sido una grata sorpresa acercarse a este momento histórico gracias a la prosa de Ana Iturgaiz. Además, ha sido un verdadero placer acercarnos al mundo de la fotografía, a través de las explicaciones que Javier hace de su arte en las páginas del libro, así como del amor por la tierra.
"... Las tierras de los Otaola serán ahora para uno de tus hijos, para un Azcona. Eso está bien. Tú hazles saber lo orgullosos que tienen que estar de su padre, enséñales a amar la tierra que un día heredarán. ¿Qué hay para un hombre más valioso que eso? Nada. Ser propietario del lugar por donde pisa, trabajar su propia tierra. Tú sabes que tu padre y yo no tuvimos esa suerte. Nunca poseímos nada, ni el tejado que nos cubría. Unos simples jornaleros, no éramos más que eso. Íbamos de un sitio a otro buscando quien nos quisiera emplear. -La anciana movió la cabeza a uno y otro lado-. Este país nuestro no es bueno para los que no poseen nada." (Página 76)
En definitiva, y a modo de conclusión, una mirada certera a la sinrazón de una guerra a través de los ojos de unos potentes protagonistas, eso es lo que nos ofrece Ana Iturgaiz con una lenguaje claro y directo en "La mirada de la ausencia", una historia que sin duda se quedará mucho tiempo en nuestro recuerdo, y que por supuesto no dudo en recomendar a todo aquel que disfrute con una buena novela histórica.

Y vosotros, ¿os animáis a conocer a Inés y Javier?

¡Nos leemos!