martes, 30 de julio de 2013

Una casa respetable. Jaime Molina.

Ante todo, gracias a la Editorial sepha por el envío del ejemplar, y pedir disculpas por la tardanza en reseñar, que nada tiene que ver con el libro, puesto que se lee fácilmente, más bien se devora.

Título: Una casa respetable
Autor: Jaime Molina
Editorial: SEPHA

Primera edición: abril de 2013
ISBN: 978-84-15819-04-2
Formato: Tapa blanda con solapas
284 páginas.
Precio: 16'95€
© Jaime Molina García, 2013
© De esta edición: SEPHA Edición y Diseño, S.L., 2013

COLECCIÓN ANÉCDOTA
Diseño cubierta: José Luis Alvarado
(Si os interesa, también se puede adquirir el libro en la página de la propia editorial, en el siguiente enlace.

Sinopsis: La Habana, finales del siglo XIX. Un joven emigrado español asciende hasta la aristocracia local mediante una envenenada alianza de sorprendentes consecuencias. De vuelta a España, Celestino Navoa carga consigo un misterio que habitará en la mansión que hace construir en Granada, la Casa de las Torres. Desde ese momento, la casa se convertirá en el principal personaje de una saga familiar en la que asistiremos a los pedazos de una historia en la que se combinan poder, venganza, deseo, locura y muerte. La casa se convertirá en el legendario testimonio de una vidas (las de sus moradores) oscuramente enfrentadas a una fatal realidad regida por una fuerza ciega. Los actos y las pasiones presentes de cada personaje, más allá de su voluntad, se verán arrastrados como una proyección del pasado, en una emocionante narración que ahonda en el denso abismo de la soledad humana.
(Sinopsis según la trasera del libro).

Argumento: La demolición en Granada de la llamada "Casa de las Torres", construida por el arquitecto César Lotario, bajo las órdenes de don Celestino Navoa, un indiano enriquecido en las Américas antes del desastre de 1898, sirve como excusa para que el Diario del siglo XXI publique una serie de cartas sobre la historia de la casa y la familia que la habitó a lo largo de tres generaciones.
Es tanto el interés que la demolición, casi en secreto, de la conocida como Casa Navoa despertó entre los lectores, que se empezaron a publicar sucesivas entregas escritas por esos mismos lectores, donde cada uno aportaba su grano de arena, según había sido la relación con la casa o con algunos de sus habitantes. Esta recopilación de entregas serán las que configuren el libro y nos acerquen a la vida y milagros de la familia Navoa a lo largo de tres generaciones, desde don Celestino, que mandó construir la casa, hasta su hijo Horacio, y su nieto Aquilino.


Acercamiento a la novela
Federico Puig, abogado de la familia, vende los derechos de publicación de las supuestas memorias de Celestino Navoa, cuya vida en La Habana comenzó solo y sin un céntimo en el bolsillo, después de que unos rateros le quitaran lo poco que llevaba. Pero su destino estaba escrito y lejos de convertirse en un indigente acabaría siendo uno de los señores de la isla. Todas las afrentas a las que tuvo que hacer frente en la isla, que atentaban contra su persona, reavivaron su enemistad con la Iglesia Católica y contra los ricos y poderosos a los que en el fondo envidiaba; su meta era ser uno de ellos.

Un altercado con los matones que custodiaban "La Mansión de los Gazules", propiedad del banquero Cesáreo Hernández, acaba finalmente en un pacto entre éste y Celestino Navoa. A cambio de su enlace con Teresa, la hija poco agraciada del banquero, éste recibiría riqueza y posición; sólo se le exigía fidelidad hacia su esposa y que concibieran un hijo varón.

La forma de actuar de Celestino y lo que los demás contaban de él a partir del momento en que adquiere relevancia social contribuye a aumentar la leyenda sobre su persona. Poco le importó el nacimiento de su hijo, encaprichado como estaba de la Casa de las Amazonas, un local con mujeres de vida alegre, y de su dueña Maica, relación que tendrá nefastas consecuencias para la vida del protagonista.

El libro está estructurado en dos partes. En la primera con la publicación de las supuestas memorias de Celestino Navoa y los rumores que sobre él se contaban, nos acercamos a su figura en La Habana. El propio periódico nos ofrece dos finales distintos de su paso por la isla, siguiendo lo que se contaba en la época, para que el lector decida con cuál quedarse.

A la llegada al puerto de Cádiz con la mujer que lo había hecho feliz, encontraría la misma pobreza que había dejado años antes. Tras recorrer varios puntos de España, se asentaría en Granada, donde haría construir una casa réplica de la Casa de las Amazonas, donde realmente fue feliz; será conocida como la Casa de las Torres, verdadera protagonista de la historia y excusa para conocer, desde un punto de vista masculino, las vivencias de la familia Navoa de la mano de aquellos que los trataron, bien trabajando como sirvientes para ellos, o por formar parte del círculo íntimo de la familia a lo largo de las distintas generaciones, o bien porque conocían rumores sobre ellos que enriquecían su no tan conocida historia.

En la segunda parte, con Celestino ya en España, el autor nos acerca, de la mano de los comentarios y anécdotas que relatan los lectores en las cartas publicadas por el periódico, a las figuras de Horacio y Aquilino, hijo y nieto de Celestino respectivamente, y por tanto los que cargarán con el peso del apellido Navoa y todo lo que ello significa en un período convulso de la historia de España, con telón de fondo en la Guerra Civil y la posterior Dictadura franquista.

Las anécdota, opiniones, comentarios o noticias que tengan que ver directa o indirectamente con la vieja casa de los Navoa ayudan a recomponer los últimos años de don Celestino y los que serían sus descendientes. Cualquier aporte o rumor vertido por compañeros de juego, de estudios o del propio servicio ayudan a acercarse al personaje de Horacio Navoa y al que sería último miembro de la familia, Aquilino Navoa. Habladurías sobre la orientación sexual y política de estos personajes, comentarios que se contradicen unos a otros, historias completadas por el propio periódico para dar más importancia a la leyenda... En definitiva, unos protagonistas y una mansión que aunque no destacaba especialmente en lo arquitectónico, había visto pasar grandes personalidades de la política y la sociedad de la época, de ahí el revuelo causado por su demolición.

Historia contada desde el punto de vista masculino, a diferencia de lo que suele ocurrir en otras sagas, las mujeres, secundarias, estarán presentes a lo largo de la historia, como esposas o amantes de los protagonistas; además, son varias las lectoras del periódico las que aportan su vivencia con los diferentes personajes masculinos. Teresa Hernández, Carlota Castel y Adriana Lerroux, así como Maica, protagonistas femeninas de la historia por su matrimonio con los Navoa, serán personajes secundarios que nos ayudarán a conocer el trasfondo real de lo narrado; matrimonios de conveniencia, amor verdadero, sufrimiento y búsqueda de una posición social que no siempre da la felicidad.

Como nota de interés, la aparición de una presencia fantasmal, que parece acompañar a los protagonistas desde el mismo momento en que se alza la Casa de las Torres, y que se mantiene hasta el momento de su demolición.

Como nota positiva del libro, la historia contada desde el lado masculino (aunque como lectora sufres con algunas de las protagonistas), y a varias voces. El recurso de las cartas que son publicadas en el periódico para dar a conocer la vida de una importante familia a lo largo de tres generaciones, siempre desde el punto de vista de las vivencias y anécdotas aportadas por los propios lectores del periódico, resulta algo muy novedoso, y a mí personalmente me ha gustado.

Se agiliza bastante la lectura porque son varios los narradores, y en ocasiones un rumor es planteado y al poco es rebatido, de forma que el lector (nosotros) puede hacerse su propia opinión sobre lo que debió ocurrir en realidad.

Una historia que se remonta al siglo XIX y que llega casi a nuestros días, con guiños a acontecimientos importantes como la Independencia de Cuba, la Segunda República, la Guerra Civil española y la Dictadura franquista, y a personajes reales, que pudieron haber tenido alguna relación con los Navoa, según la rumorología popular, como el poeta Federico García Lorca o un aún poco conocido Alfonso Guerra.

En definitiva, una obra interesante, que ya se alzó con el Premio de Novela Juan Valera, que organiza el Ayuntamiento de Cabra (Córdoba), en el año 2009. Obra interesante y que se deja leer a pesar (y eso se agradece) del rico vocabulario de su autor. Ha sido un buen descubrimiento, y lo recomiendo si queréis adentraros en una lectura diferente de las llamadas sagas familiares, narrada eso sí por muchas y variadas voces.

Aquí dejo el booktrailer del libro, por si alguien se anima:




Sobre el autor
Jaime Molina García nació en Linares (Jaén), en 1969. Es Licenciado en Informática por la Universidad de Granada, donde trabaja en la actualidad, compaginando su actividad profesional con la escritura.
Es autor de cuentos, novelas cortas y novelas, habiendo sido premiado en las tres categorías en diversos certámenes literarios. Entre sus premios caben citar el Castillo-Puche de novela corta por El fantasma de John Wayne (2008), el premio de narrativa Rei en Jaume por El pianista acompañante (2009) o el Juan Valera de novela por Una casa respetable (2009), así como el Premio Ciudad de Valencia de novela por Lejos del cielo (2011), obra publicada también por la editorial Sepha.

Como siempre, se agradecen los comentarios. Nos leemos.


miércoles, 10 de julio de 2013

Aquí yacen dragones. Fernando León de Aranoa.

Venimos hoy con la reseña de un libro de relatos, publicado por la Editorial Seix Barral, dentro de su colección Biblioteca Breve.

Título: Aquí yacen dragones
Autor: Fernando León de Aranoa
Editorial: Seix Barral (Biblioteca Breve)
Primera edición: febrero de 2013.
© Fernando León de Aranoa, 2013
© Editorial Seix Barral, S. A., 2013
ISBN: 978-84-322-1476-9
Formato: Rústica con solapas
200 páginas
Precio: 17'00€
(También disponible en e-book)
© de la portada: Manurs


Sinopsis (según la trasera del libro): Los dragones del título yacen desde hace siglos en los mapas incompletos de la antigüedad, en los que el mundo terminaba allí donde lo hacía el conocimiento. Hic sunt dracones, una leyenda que advertía en ellos de la existencia de terribles peligros, disuadiendo a navegantes y exploradores. Y al tiempo, una bella metáfora. donde termina el saber, empieza la imaginación.


Estamos ante un libro de relatos, algunos muy breves, y como se dice en la presentación, es éste un libro para perderse en él. Conozco a Fernando León de Aranoa, como creo que nos ocurre a muchos, en su faceta de director de cine. He tenido el placer de disfrutar la mayoría de sus películas (no he visto Amador), pero debo reconocer que me ha gustado mucho encontrarlo en su faceta de escritor. No soy mucho de leer relatos, suelo disfrutar con historias largas en las que te metes en la trama y acompañas a los personajes en sus diferentes vivencias, con ansia por llegar al final. Los altibajos que las novelas pueden tener en ocasiones se van compensando a medida que pasan las páginas... en un relato corto hay que conseguir la perfección en pocas líneas, y creo que en algunos aspectos el autor lo consigue en su libro.

Aquí yacen dragones nos presenta ciento trece relatos (o cuentos cortos) en menos de doscientas páginas. Sugiere el autor que "se lean los relatos en orden, dejando una pausa entre ellos, que se quite el buen o mal sabor de boca que haya podido dejar el anterior mirando al horizonte o al edificio de enfrente".

Son relatos cortos, la mayoría escritos en una o dos páginas; el más largo "Una casa abierta" ocupa siete páginas. Dentro de los cuentos que ocupan una sola página encontramos relatos de apenas cuatro líneas como "Derechos" y "El error de Arquímedes" (este último te deja con una pequeña sonrisa); relatos de tres líneas, como "Culpable", "Los terratenientes", "Los escépticos", "No sé qué pensar" y "Adjetivos"; relatos de dos líneas, como "El hombre", "Los meteorólogos en el ascensor" y "Acuerdo"; relatos de una sola línea, como "Colorín colorado", "Risas", o incluso relatos sin texto, como "Memorias de un amnésico".

Si hay algo positivo en estos textos es que de verdad te dejan pensando, y en algún momento a lo largo de la lectura del libro se te pasa por la cabeza el porqué no se te habrán ocurrido a ti (en algunos momentos ésta ha sido mi apreciación). Queda establecida una sintonía con el autor a medida que se avanza en la lectura.

Hay relatos que te dejan huella, en mi modesta opinión, como "Voluntades" y "La vanidad del asesino", pero éstos no son más que algunos ejemplos. Repasando los títulos puedes recordar el sentido de los textos. Disfruté mucho con "Instrucción única para deshacerse de un cadáver de tamaño medio" en el que el autor aplica la lógica del día a día.

El libro habla de sentimientos, de ternura, de amor y desamor, de infortunios (muerte y enfermedades). El tema de la muerte está tratado en relatos como "Las muertes de María" y "Las siete tumbas del Sr. Barea". Habla mucho de aeropuertos, que no son más que "lugares de tránsito, de despedidas y reencuentros". El tema de los aeropuertos parece bien dominado por el autor, en especial porque según sus palabras "algunos de estos relatos están escritos en las salas de espera de los propios aeropuertos".

El libro tiene varias almas, como el propio autor, y una de ellas es su alma política, que queda reflejada en textos que hablan sobre la inmigración y la tortura. Encontramos además guiños a sus películas, como en el caso de "Los adioses elegidos", en el que vemos paralelismos con su película "Familia".

Me ha gustado el libro, y he disfrutado con su lectura. Me ha hecho ver que hay que darle una oportunidad a los relatos, que a veces dejamos de lado, y no descarto retomar este tipo de lectura si cae en mis manos. Además, me ha servido de descanso entre libros, que todos sabemos que a veces nos atrevemos con auténticos tochos (por el tamaño) que no podemos dejar para no perder el hilo del argumento. En este sentido, esta lectura te relaja y te deja pensando. Como podéis comprobar, a mí me ha gustado bastante, y lo recomiendo.

Sobre el autor

Fernando León de Aranoa (Madrid, 1968) es guionista y director de cine.
Su primer largometraje fue Familia (1996), con el que consiguió el Premio Goya a la mejor dirección novel. Le siguieron Barrio (1998), Los lunes al sol (2002), Princesas (2005), que fue su cuarta película como director y guionista y su debut como productor, y Amador (2010).
El conjunto de su trabajo ha merecido trece premios Goya, cinco de ellos a título personal, y ha sido presentado con regularidad en festivales internacionales como los de San Sebastián, Sundance, Berlín, Valparaíso, Ciudad de México, Los Ángeles, Valladolid o La Habana, habiendo resultado galardonado en muchos de ellos. Ha escrito y dirigido varios documentales y ha publicado con anterioridad relatos, por los que ha sido finalista del Premio Camilo José Cela y ha recibido el Premio Antonio Machado de narrativa breve. Ha publicado también Contra la hipermetropía (2010), una colección de textos y artículos que expresan su manera de entender el oficio de la ficción.

(Datos del autor sacados del propio libro).

Si queréis conocer algo más sobre el autor y su obra, no dejéis de ver la entrevista que le hicieron en el programa Página 2, de TVE, el 24 de marzo de 2013, con motivo de la presentación del libro. Junto a la entrevista a Fernando León de Aranoa se habla en el programa del proceso de reescritura de las obras, de la mano de Ignacio del Valle y Donna Leon, de los rescatados de Página 2, y de varias recomendaciones literarias. El programa merece la pena, por si queréis echarle una ojeada, aquí os dejo el enlace a la entrevista a Fernando León de Aranoa en Página 2.

¿Qué os parece la propuesta?. ¿Habéis leído el libro?. ¿Os gustan los relatos?.

¡Se agradecen los comentarios! Nos leemos.

miércoles, 3 de julio de 2013

Cinco. Ursula Poznanski.


Esta reseña forma parte del sorteo y lectura conjunta organizada por los blogs de Laky (Libros que hay que leer) y Tatty (El universo de los libros). Gracias a la Editorial La Esfera de los Libros por el ejemplar.


Título original: Fünf
Edición original: Rowohlt Verlag GmbH, 2012
© De la traducción: Susana Andrés, 2013
© La Esfera de los Libros, S.L., 2013
Título en español: Cinco
Autora: Ursula Poznanski
Editorial: La Esfera de los Libros, S.L.
ISBN: 978-84-9970-592-7
Edición: Tapa dura con sobrecubierta
434 páginas
Precio: 21'90€


Argumento: El cadáver de una mujer de unos cuarenta años es encontrado en un prado donde pastaban unas vacas, cerca de Abtenau (Salzsburgo, Austria).
Beatrice Kaspary y Florin Wenninger, de la Oficina Federal de Investigaciones Criminales, serán los policías encargados, bajo la supervisión del jefe superior Hoffmann, de un caso que podría haber sido tratado como accidente, de no haber tenido el cadáver las manos atadas. En las plantas de los pies de la víctima aparecen tatuadas combinaciones de números que son tomados por la policía como coordenadas, que forman parte de una "búsqueda del tesoro" en el que se verá inmersa la pareja protagonista, con consecuencias para su propia vida.
Si queréis leer la sinopsis completa del libro, seguid este enlace.


Impresiones

Debo reconocer que el libro me ha dejado un buen sabor de boca. La autora ha sabido jugar con el tema de una búsqueda del tesoro para llevar al lector a lo largo de una investigación de asesinato, cuyo responsable parece ser un asesino en serie, al que mueven unas razones, que si bien no están claras en un inicio, se van aclarando a medida que avanza el libro, y ya en su conclusión.

Han comparado a la autora austriaca con Camilla Läckbery y Asa Larsson, aunque cada una tiene su estilo, que nos puede gustar más o menos. Lo importante es disfrutar con la lectura y con este libro se consigue.

Ursula Poznanski nos presenta aquí a una pareja de policías, que llevan dos años trabajando juntos pero que se conocen muy bien. Beatrice será pieza importante en la trama (ahí puede estar el paralelismo con las autoras antes citadas y sus protagonistas femeninas), y Florin la ayudará en lo laboral y personal. Beatrice se nos presenta como una mujer separada, con dos hijos, Mina y Jakob, que tiene que compaginar su trabajo con el cuidado familiar (gracias a la ayuda de su madre), y que no tiene una buena relación con su ex-marido, Achim, que tiene por costumbre llamar a altas horas de la noche para interesarse por los niños. Además, Beatrice guarda un importante secreto de su vida anterior, que tendrá relevancia en la trama, y del que seremos partícipes bien avanzada la historia.

Todos los motivos citados anteriormente pueden hacer que no conectemos desde el primer momento con el personaje femenino principal, pero a medida que avanzan las páginas tendemos a comprenderla (otra cosa es que estemos de acuerdo o no con su forma de actuar respecto a sus hijos y su ex-marido), o al menos yo lo he hecho, y no me ha resultado tan antipática como a algunos de los participantes en la lectura conjunta.

Si este libro tiene un toque especial, y creo que lo hemos visto todos, es la utilización del geocaching como nexo de unión.

A estas alturas, y si habéis leído el resto de las reseñas, todo el mundo sabe ya lo que es el geocaching (reconozco que yo particularmente no tenía ni idea de su existencia hasta que me he acercado a la lectura de Cinco). Para definirlo con palabras sencillas, es una especie de búsqueda del tesoro, en la que se utiliza un GPS y se trabaja con coordenadas. Los caches que se buscan son contenedores herméticos (en los que puedes encontrar casi cualquier cosa). Se hacen trades (lo habitual es sacar algo del recipiente y meter otra cosa), y se suelen utilizar acrónimos para dar las gracias (en el libro se repite mucho TFTH (Thanks for the hunt) (Gracias por la caza)).

Es precisamente el personaje de Stephan Gerlach, un joven compañero de trabajo de Beatrice y Florin el que los pone sobre la pista de esta práctica tan extendida, y en la que él mismo participa en sus ratos libres. Stephan pronto formará parte del equipo de investigación que guía al resto en la "búsqueda del tesoro", que no es más que una sucesión de pistas que dan lugar a nuevas coordenadas para llegar al desenlace final.

En mi opinión la autora ha sabido mantener la intriga, y el hecho de ir conociendo poco a poco a los personajes principales no es algo que me haya decepcionado. Reconozco que tardas un poco en conectar con ellos, pero a medida que conoces sus motivaciones van ganando peso. Beatrice demuestra amar su trabajo y a sus hijos, aunque estos últimos queden relegados a veces al cuidado de los abuelos. No tiene una buena relación con su ex-marido, pero no quiere cortar drásticamente la relación, pese a las llamadas telefónicas a horas intempestivas:
"Si cambio el número de teléfono, lo tengo en la puerta en menos de lo que canta un gallo. Y es el padre, tiene derecho a estar en contacto con sus hijos".
 Esconde un secreto de juventud que la perseguirá siempre, motivo por el cual acabó haciéndose policía (secreto que conoceremos bien avanzado el libro), y que parece convertirse en nexo de unión con el asesino.
"Era imposible dar marcha atrás en el tiempo. Imposible corregir el pasado. En caso contrario no estaría aquí."
Quizá los personajes son algo tópicos: mujer policía que quiere ser buena en su trabajo y con su familia (aunque se vea obligada a pedir favores), compañero que la ayuda en lo profesional y en lo personal (con el que se entrevé algo más que una mera amistad), y jefe que hace la vida imposible a sus subordinados, más pendiente del eco que está teniendo la noticia del asesinato que de la investigación en sí. Pese a todo, el conjunto me ha gustado. Conoceremos también a otros personajes, que van a ir formando parte de la investigación, y que resultarán de gran relevancia a la hora de aunar los acontecimientos del presente con el pasado, y dar sentido a la trama.

La historia, contada en pasado y en tercera persona por un narrador omnisciente, que nos acerca a los acontecimientos y a los pensamientos de los protagonistas, no está estructurada en capítulos como tal; la trama se va sucediendo y la historia en ocasiones viene precedida por unas coordenadas, características de las diferentes etapas por las que pasa la búsqueda, con una sucesión de hechos trascendentes.

Se nota que la autora conoce el tema del geocaching (tal como avisa al final del libro, ella lo practica), y ese conocimiento de la naturaleza embellece las descripciones, de forma que parece que somos partícipes también del momento de encontrar los "tesoros", por la forma de acercarnos al entorno. La abundancia de diálogos hace también que la lectura resulte amena y se avance rápidamente hacia el desenlace. Lástima no estar en Salzsburgo para practicar geocaching con los acertijos que se nos plantean en el libro. En definitiva, una lectura amena muy recomendable para todo aquel que quiera disfrutar de un buen rato de intriga.

Si os sentís atraídos por el geocaching, al parecer también muy practicado en España, no dejéis de visitar las siguientes páginas:

Curiosamente, cuando ya se había planteado la lectura conjunta, vi un reportaje en TVE en un telediario del fin de semana, donde se hablaba de esta práctica en España (desde luego no tiene nada que ver con asesinatos y disfrutas de la naturaleza, a la que hay que cuidar, como dice la autora al final de su libro). Os dejo el enlace al vídeo por si os animáis a verlo:



Sobre la autora

Ursula Poznanski nació en Viena en 1968, se matriculó en diversas carreras y aterrizó en una editorial técnica de Medicina. Tras el éxito fulminante de sus novelas para jóvenes -Erebos y Saeculum-, en la actualidad se dedica fundamentalmente a la literatura. De su primera incursión en el género policíaco, Cinco, se han vendido cerca de 200.000 ejemplares en lengua alemana y ha sido traducida al coreano, francés, holandés e italiano. Vive con su familia al sur de Viena.

(Datos biográficos extraídos del propio libro).

(Como esta reseña forma parte de una lectura conjunta, aquí os dejo un enlace al blog de Tatty donde se están colgando las diferentes reseñas de los participantes, por si queréis echarles un ojo).

Si os animáis con la lectura, no creo que os defraude, y os hará pasar un buen rato. Creo que le daría una oportunidad a la serie si continuara, porque me quedo con ganas de profundizar más en los personajes.

Se agradecen los comentarios.