Título: La madre
Título original: The Mother
Autora: Pearl S. Buck
Traducción: Carlos Paytuvi
Editorial: Debolsillo
Colección: Biblioteca Pearl S. Buck
© Herederos de Pearl S. Buck
© 2009, Random House Mondadori, S.A.
Segunda edición en esta colección: julio, 2011
ISBN: 978-84-9908-036-9 (vol. 117/3)
Formato: Rústica sin solapas
240 páginas.
(Libro escrito en 1934).
Sinopsis: La madre es la historia de una mujer china, en el marco histórico de la década de 1930, a quien no se da nombre propio alguno en la novela -al igual que a los demás personajes, pues solo se hablará, en alguna ocasión, y como incidentalmente, de una tal familia Li, y que personifica a la sufrida madre rural china.
Datos sobre la autora
Pearl Sydenstricker Buck (Pearl S. Buck) (1892-1973) nació en Hillsboro, Estados Unidos. Hija de misioneros presbiterianos, vivió en China hasta 1933, lugar en donde se sitúa la mayor parte de sus más de 85 libros. Cultivó géneros tan dispares como la novela, el teatro, el guión cinematográfico y la literatura infantil. Su estilo, sencillo y directo, así como su interés por los valores humanos, le valieron en 1938 el premio Nobel de Literatura. Entre sus obras destacan Viento del este, viento del oeste (1930), La buena tierra (1931), ganadora del premio Pulitzer, y La estirpe del dragón (1942).
Impresiones sobre el libro
"La madre" es un libro bastante completo, puesto que sus escasas 240 páginas pueden hacer que lo englobemos en diversos géneros. Es un libro exótico, puesto que nos acerca a la China de la década de los años treinta, en concreto a un entorno rural alejado de la gran ciudad, donde vemos cómo sobrevive una familia rural día a día con su trabajo en el campo... Pero es también un libro familiar, puesto que es la historia de esta misma familia, centrado en el personaje de la madre, que da título al libro, y es también un libro que muestra diferencias políticas y sociales. Los campesinos de la aldea donde se desarrolla la trama cultivan unas tierras que no son de su propiedad y cada año deben partir la cosecha con un señor, al que nunca ven, aunque cada año acuda su representante... Del mismo modo, asistimos en las páginas del libro a los inicios del comunismo en China, representado en el personaje de uno de los hijos, y de cuyo hecho se van dando pinceladas a lo largo de la trama. Exotismo, política y familia son alguno de los temas que podemos encontrar a lo largo de la lectura del libro.
Reconozco que me he acercado a este título por completar el reto genérico 2014 al que me he apuntado y que tengo algo abandonado. Conocía algunos títulos escritos por Pearl S. Buck (sobre todo Viento del Este, viento del Oeste), pero no había tenido oportunidad de leer el título que presento hoy. Lo encontré en la biblioteca, y me atrajo sobre todo el número de páginas y el formato en bolsillo, que facilitaba su traslado. Me tiraba un poco para atrás que no se nombrara a los personajes, solo por su parentesco, pensando que eso iba a hacer que perdiera el hilo de la trama, pero he de decir que en ningún momento ocurre esto, y está bien conseguido que sea un personaje principal el que se convierta en centro de la historia y que a partir de él surja toda la trama, aunque siempre bajo su punto de vista.
La madre nos ayuda a conocer la diferencia entre hombres y mujeres en la China rural de la década de los treinta. A través del pensamiento de la protagonista principal vemos las diferencias que podemos encontrar. Las mujeres se presentan como personas que luchan día a día por sobrevivir, que son felices por ocuparse de su familia, de su trabajo, que se enorgullecen si son madres o esposas, que disfrutan viendo crecer a los suyos, si la cosecha les ha permitido comprar un poco de tela para hacerse un nuevo vestido... o el nuevo traje con el que habrían de amortajarlas. El personaje de la madre habla de aceptación, de lucha del día a día, conformándose con las pequeñas cosas que la vida ofrece. Los hombres en cambio (es el caso del marido) son en ocasiones presentados como inconformistas, que no encuentran aliciente ni futuro a repetir uno y otro día las mismas acciones, trabajo en el campo y poco tiempo de descanso para volver al día siguiente a la misma rutina, y se rebelan contra ese sistema, o bien huyendo hacia otra realidad diferente o entran a formar parte de ideales políticos que buscan un cambio en este sistema preestablecido.
En el libro quedan claros los roles que desempeñaba cada cual en la sociedad china de este momento, en especial en una comunidad rural. Las mujeres eran madres y esposas, y a medida que se iban haciendo mayores soñaban con bodas y nacimientos, para dejar bien colocada a su prole cuando ellas no pudieran servir ni para llevar la casa ni para trabajar en el campo. Asistimos en el libro a la búsqueda del marido o la esposa perfecta para los hijos de la protagonista, siempre con idea de futuro, y al anhelo de la llegada de nietos que continuarían con el trabajo diario. Aunque hay un respeto a las personas mayores, se asiste a lo largo de la lectura al relevo generacional que se produce dentro de las humildes casas, y cómo los mayores van cediendo privilegios en favor de los más jóvenes (la habitación principal se cede a la pareja de recién casados y el mayor de la familia cambia su cama por un pequeño e incómodo catre). Todos ayudan en las labores diarias, cada uno en función de sus posibilidades: unos trabajan duramente en el campo, otros se ocupan de la casa y la comida, otros simplemente vigilan el fuego y a los niños si no pueden moverse... nadie es una carga, o al menos intentan no serlo, porque eso supondría un problema para la subsistencia de la propia familia.
El libro está plagado de ideas políticas, ya hemos dicho que asistimos a los principios de la fundación del partido comunista en China, hecho que tuvo lugar en 1921. Los comunistas eran definidos como "una nueva clase de ladrones que existen hoy". Algunos de los crímenes que se les achacaban eran "distribuir gratuitamente a la gente libros en los que se decían muchas cosas malas sobre derribar el Estado y distribuir por igual todo el dinero y toda la tierra". Del mismo modo, asistimos al choque de pensamiento religioso, cuando una madre cree que algunos de sus actos han enfadado a los dioses y que por ello está siendo castigada ella y su familia.
La madre es ante todo un libro ameno, que se lee bien, y que sirve para conocer una realidad diferente y otra época de un país tan desconocido como es China. A pesar de que los personajes no tienen nombre propio, sino que se habla de ellos por su parentesco, y apenas se nombra a una tal familia Li, no se pierde el hilo de la historia en ningún momento. Es un libro algo triste, de supervivencia, pero que se deja leer, y te acerca a otra época y otro tiempo. Aunque no abundan los diálogos, la lectura no se hace pesada, y poco a poco vamos introduciéndonos en una realidad de la que queremos saber más. Yo personalmente he disfrutado con la trama y con las dificultades que en ella se cuentan. No me hubiera importado conocer algo más de la vida de estos personajes, aunque al final del libro se intuya qué pasará con ellos. En definitiva, a mi modo de ver, una lectura interesante, con la que he disfrutado. No descarto acercarme de nuevo a la obra de Pearl S. Buck, porque hay buenos autores a los que tenemos muy abandonados.
Tenía algún título del autor entre mis pendientes y por lo que cuentas, me voy a anotar este que también parece muy interesante
ResponderEliminarBesos
A mí me han quedado ganas de leer algo más de esta autora, así que no descarto buscar algún título más.
EliminarBesos.